En el mes de junio se registró un aumento de la tasa de inflación

El índice de precios al consumidor aumentó 2,2% en el mes de junio, variación superior a las que se habían observado en los dos meses anteriores. En los primeros seis meses del año el IPC acumuló un crecimiento de 13,6% y en los últimos doce meses el aumento del índice alcanzó a 42,8%, continuando, de esta forma, la tendencia decreciente que viene observándose desde el último trimestre de 2019. La región patagónica (1,9%) y el Gran Buenos Aires (2%) registraron tasas de inflación inferiores al promedio, en tanto que la región pampeana (2,5%) fue la que registró la mayor variación.

El principal impulso al incremento de los precios provino del impacto estacional característico de algunos bienes como prendas de vestir y calzado, en especial en las regiones del interior del país, mientras que en el Gran Buenos Aires se destacó el aumento del rubro “Equipos audiovisuales, fotográficos y de procesamiento de la información” que alcanzó a 14,9%, aumento que incidió en el incremento registrado en los rubros “Recreación y cultura” que alcanzó al 4,2% y “Equipamiento y mantenimiento del hogar” que aumentó 4,1%. La inflación núcleo alcanzó al 2,3%, mientras que los bienes y servicios estacionales aumentaron 4,8% y los regulados 0,7%. 

En el corto plazo, el mantenimiento de las medidas de aislamiento social lleva a prever una disminución de la tasa de inflación en el mes de julio. De manera general, para lo que resta del año la dinámica de la inflación dependerá en gran medida de lo que suceda en el mercado de cambios, cuya evolución estará asociada a cómo se vayan resolviendo, por un lado, la negociación de la deuda y, por otro, los equilibrios monetarios a medida que, dependiendo de la evolución de la emergencia sanitaria, se pueda flexibilizar la cuarentena.